El curso pasado ha sido muy duro para mi. No me ha pasado nada, ninguna desgracia, nada fuera de lo común, pero cada día fue cayendo como una losa encima de la anterior. El deterioro físico que he ido notando a lo largo del año ha llegado a límites que no creí alcanzar tan pronto.
Y lo único que ha cambiado ha sido el ritmo que llevo, mirar mi agenda marea… Y en estas vacaciones igual, ni las he notado, llevo la misma velocidad que cuando trabajo.
Me paso todo el día deseando que llegue la hora de dormir, y eso no puede ser bueno.
Me he ido unos días a Asturias a desconectar, eso si, cargada de libros, agujas, costura… curro! Y al final no hice NADA. No se cómo ha sido, pero poco a poco las cosas que antes hacía por placer se han convertido en otra obligación más, parece que estoy en una constante carrera; tengo que tejer más rápido, aprender a coser, a palillar, ir a cuanta quedada, encuentro, feria de manualidades hay!
Llego a la casa rural y descubro que no hay cobertura en ninguna parte en 10 km a la redonda; 7 días sin mail, sin móvil, sin internet, sin whatsapp, sin facebook, sin twitter, sin pinterest… y sentí como si se me soltara el estómago, un alivio inmenso porque no podía hacer nada para solucionarlo, no estaba en mi mano y por lo tanto no era responsable.
Así que me dediqué a NO TEJER, NO COSER, NO LEER, NO NADA DE NADA y en cambio hablar con mi hija, cantar en la ducha, comer chorizo a la barbacoa, escanciar sidra y pensar.
Y estas son algunas de las decisiones que he tomado:
-Hacer menos cosas y hacerlas bien.
-Levantarme antes y desayunar sentada.
-Reservar tiempo para no hacer nada.
-Apagar el móvil a las 10 de la noche.
-Reducir el uso del ordenador drásticamente.
-Aprender a decir NO.
-Parar esta locura consumista.
-Ralentizar el ritmo diario.
…y muchas otras.
Me siento mejor sólo con haberlo escrito 🙂
«Si tienes un problema y no tiene solución, para qué te preocupas; y si tiene solución para qué te preocupas.» Proverbio chino
Dios mio!! hasta donde nos lleva esta vida que viv imos, gracias a Dios que te has dado cuenta de parar!!! solo deseo que seas consecuente con esta decisión, no es nada facil tomarla, adelante!!
Cuánta razón tienes. Cogeré a mi hija por el cogote y le haré leer esto que has publicado. Enhorabuena por haber tomado conciencia. Yo un día, hace seis años ya, tomé conciencia de que el tabaco me estaba matando. Al día siguiente de haber tomado conciencia dejé de fumar. No hubo sacrificio: Había tomado conciencia. Un abrazo.
Hola corazón, me alegro de que esta semana de relax te haya sentado bien y hayas conseguido relajarte, ahora a aplicarse el cuento de todo lo que dices arriba. Yo lo hice una temporada y me fue bien, lamentablemente recaí, pero está bien recordárselo a una misma de vez en cuando :)))))
Un besito linda,
La que hoy vuelve al trabajo, qué perezaaaaaa
¡Eso son unas vacaciones como Dios manda! te apoyo en todas tus decisiones y te animo a seguir adelante con ellas.
Un abrazo,
SIONA
Buenos días
Parece que esta semana de desconexión te ha sentado estupendamente y me alegro de que NO HAYAS HECHO NADA, sienta de marabilla no hacer nada de ves en cuando.
Por cierto me gustan mucho las fotos 😉
Otra que disfrutó de no hacer nada en las vacaciones y ahora se ve en un torbellino (aunque lo mío es peor, porque cuando siento que TENGO que hacer muchas cosas no hago ninguna y me agobio igual)
En fin, que disfrutes de este nuevo estado 🙂
Y bienvenida!
Me siento totalmente identificada contigo. Supongo que nuestras vidas son muy diferentes, pero el curso escolar para mí también fue terrible, aunque de otra forma. Yo también he tomado algunas decisiones sobre mi vida, algunas las comparto contigo y otras son diferentes, pero en esencia ambas hemos tomado la determinación de poner orden en nuestras vidas y nos deseo a las dos toda la suerte y la fuerza del mundo.
Preciosas las foto 🙂
siempre es bueno echar el freno, parar y contemplar el paisaje. a veces la vida diaria nos engulle y nos quejamos por las prisas y los agobios pero somos nosotros mismos los que nos hemos embarcado en tantas cosas a la vez.
felicitaciones por tan sabia decisión.
muchos besos de brujita.
Completamente de acuerdo! Hay que saber parar a tiempo y la mayoría de las obligaciones nos las imponemos nosotros mismos. Adelante con tu nueva vida. Besos.
Me pasa eso siempre, pero cuando empiezo a agobiarme por tejer más deprisa, me relajo y recuerdo que tejo para disfrutarlo. No puedo permitir que se vuelva una obligación más. Besitos!
Excelente reflexión. Me ha hecho pensar… muchas gracias por hacerla. Al menos que sepamos que hay otras maneras de vivir aunque nuestra vida no cambie. Siempre sabremos que hay otras opciones.
non sabes como te entendo, mesmo o blog faise carga, o meu verán tm foi de moita foganza : )
Grandes reflexiones. Solo leerlas ya sosiega.
Super fotos también.
Bicos guapa
Son buenas decisiones, ánimo y a llevarlas a cabo poco a poco. Estoy por colgármelas yo también en algún sitio visible. (ah! las fotos una maravilla)
Me alegro que te encuentres mejor. Tus palabras hacen recapacitar y están cargadas de razón. Yo me encuentro en la fase que tu estabas antes de estas vacaciones, llevo muuuchas losas encima. Voy a leerme tu post otra vez porque me ha hecho recapacitar. «Tu proverbio» me lo repite una y otra vez mi marido.
Qué fotos. Me encanta la del canalón. Un saludo de una asturiana.
Mucho ánimo con estas decisiones. Yo también me siento muy identificada con tu post. Mi año fue horrible, y me he encontrado cada vez más harta de muchas cosas. Desconectar y no hacer nada en las vacaciones me vino fenomenal. Mi problema es encontrar la forma de cómo bajar el ritmo.. Ánimo!
Ainssss espero que al menos el Club de los Sábados te haga feliz!!!! Besitosss
Realmente el ordenador puede llegar a ser por que la tele.
Disfruta mucho más de tu familia, no se puede vivir sin ellos, o quizás se puede… pero no vale la pena.
Es sanísimo. Yo lo hago siempre en vacaciones. Un mes sin ordenador -ni siquiera para ver fotos-, sin Internet, sin móvil… y repito todos los años.
Pues…lo malo de esto es q al otro charco de espera e doble de trabajo y de ganas por querer aprender de todo antes de que se acabe el plazo…pero merece la pena